Muchos de nosotros disponemos de espacios realmente pequeños en los que no nos resignamos a prescindir del "verde". Hablamos de balcones, espacios abiertos de apenas un par de metros cuadrados, o una simple y pequeña terraza.

Pues bien, las buenas ideas pasan por dos puntos clave: aprovechamiento óptimo del espacio y buen gusto estético. La primera premisa es que NO siempre tus plantas tienen que estar a nivel de suelo: las paredes son más que aprovechables, y en ellas tienes que colocar todo tipo de soportes, repisas y macetas colgantes, Tambien toma en cuenta que debes generar dinamismo cuando diseñes tu jardín. Así que, si juegas con alturas diferentes te generara un espacio más vital y dinámico. Utiliza mesas pequeñas, porta-macetas, bancos o repisas para crear diversos niveles.

Un buen tip cuando diseñes tus jardines en el interior, es crear grupos de plantas, el buen gusto pasa por una disposición armónica (ni tapar de plantas ni poner muy pocas) que contemple especialmente el porte (debe ser gracioso y no muy invasivo porque el espacio es pequeño) y la combinación de colores.

No todo son macetas redondas --diseña un lindo espacio utilizando cajas de madera, adaptados para poder utilizar plantas. Coloca repisas sobre una esquina o una estantería y comienza a jugar con diversos tamaños de cajas o formas poligonales de macetas. Busca plantas con hojas pequeñas y haz grupos. Permite que visualmente haya espacios entre cada repisa para que luzcan las plantas y tu diseño. Utiliza figuras de cerámica o letreros creativos. Y para terminar, ubica una linda enredadera que caiga sobre los demás niveles.

Como último aspecto, tal como puedes ver en la imagen de portada, juegan tanto el color de las plantas y flores en sí mismas como el color de las repisas y accesorios que elijas. Pon en juego toda tu creatividad, y tu jardín pequeño será un verdadero paraíso.